Tratamiento del conducto radicular
Rama de la odontología que se ocupa de toda la cavidad pulpar que contiene la pulpa dental y los conductos radiculares de los dientes.
¿Cómo funciona?
Tratamiento de conducto radicular asistido por láser.
El uso de láser en Endodoncia ofrece ventajas notables en el tratamiento de elementos vitales y necróticos con raíces infectadas y lesiones quísticas granulomatosas o periapicales.
Mediante la integración de las técnicas de instrumental tradicionales con el uso correcto del láser, el número de fallas en endodoncia puede reducirse notablemente. Esto limita la propagación de infecciones dentro de la cavidad oral y protege la integridad del tejido al máximo.
El KTP (532 nm), Nd:YAG (1064 nm) y diodo láser (810 or 980 nm) son las fuentes láser más utilizadas en endodoncia.
El láser se utiliza para garantizar:
• Descontaminación del área del conducto radicular.
• Secado perfecto del canal y delta apical.
• Hemostasia en caso de sangrado.
• Vitrificación y esterilización de la dentina endodóntica, especialmente en el delta apical.
• Eliminación de la capa de frotis y cualquier residuo de pulpa.
• Calentamiento de la gutapercha en operaciones de corte y compactación.
Uno de los principales objetivos del tratamiento del conducto radicular con láser, es obtener un entorno de canal altamente descontaminado para maximizar las probabilidades de éxito.
En línea con el enfoque moderno para el tratamiento del conducto radicular, el procedimiento para preparar el conducto consiste en:
Eliminación total del tejido pulpar y de todos los microorganismos patógenos presentes; Forma preparatoria del canal para permitir un relleno fácil y eficaz.
A pesar del método utilizado, estos objetivos lamentablemente no se logran en el 100% de los casos, ya que una cierta cantidad de tejido pulpar y microorganismos siempre permanece dentro de la luz del canal. El objetivo terapéutico de cada tratamiento es, por consiguiente, curar y proteger el tejido perirradicular, lo que es posible cuando el conducto radicular y los tejidos adyacentes están libres de microorganismos infectados.
Existen tres aspectos principales que deben superarse para lograr un ambiente descontaminado:
Estructura anatómica;
Calidad específica de la colonización bacteriana (especie anaerobia gramnegativa); bacterias resistentes a los irrigantes orales.
La estructura anatómica del conducto radicular representa un problema para lograr una descontaminación perfecta tanto en términos macroscópicos como microscópicos. La capa de frotis residual permanece en varios huecos, exacerbando el proceso inflamatorio. El microambiente de los túbulos dentales favorece la selección de los relativamente pocos tipos de bacterias que se encuentran allí. De aproximadamente 300 tipos de bacterias presentes en la cavidad oral, solo una docena logra sobrevivir en el canal. Cuando una infección está en progreso, la dentina del canal actúa como una incubadora donde las bacterias prosperan sin encontrar ningún agente del sistema inmunitario.
Los tratamientos tradicionales del conducto radicular tienen como objetivo reducir la carga microbiana mediante la eliminación mecánica de la pulpa infectada y los residuos del conducto radicular con irrigantes antibacterianos específicos. La capacidad de penetración de los irrigantes se limita a las paredes del conducto radicular debido al diámetro limitado de los túbulos y la alta tensión superficial de los propios irrigantes (no más de 100-200 μm dentro de los túbulos dentales).
El láser representa un medio válido para que la radiación penetre profundamente en la dentina gracias al uso de fibras finas con un diámetro de 200 μm Schoop et al. («Longitudes de onda innovadoras en el tratamiento de endodoncia». Laser Surg Med 2006. 38 (6): 624-30) demostró que mediante el uso de protocolos adecuados, la capacidad antimicrobiana del láser comienza a disminuir después de una penetración de 1.000 μm en la dentina del conducto radicular, sin crear ningún aumento térmico que pueda dañar las estructuras periodontales y prevenir el riesgo de perforación radicular. Claramente, la acción descontaminante y antimicrobiana del láser es mucho más alta que la de los irrigantes. Por esta razón, los procedimientos de endodoncia asistida por láser aseguran un número mucho mayor de éxitos en comparación con los realizados solo con técnicas tradicionales